4 razones por las que llevar tu ropa a la lavandería

Si estás harto de poner y tender lavadoras, puede que sea el momento de plantearte llevar tu ropa a una lavandería. En España, hasta ahora, no teníamos esta costumbre tan normalizada, pero en algunos países anglosajones es muy frecuente, ¿quién no recuerda alguna película estadounidense donde el protagonista da vueltas a sus problemas al mismo ritmo que centrifuga su ropa en la lavandería?

 

1. Ahorras tiempo

En función del programa que escojas, en casa el tiempo de espera se puede demorar desde 45 minutos hasta casi una hora y media. Por ejemplo, un lavado sintético a 40º y a plena carga (entre 3 y 4 kg de ropa) tarda 1 hora y 28 minutos de media, según indica la OCU. Muchas veces tienes que esperar a que termine antes de salir de casa para que tu colada no se arrugue y coja humedad metida en el tambor durante horas.

Por otro lado, si no dispones de tendedero al aire libre, el tiempo de tu ciudad no acompaña o tienes que secarlo dentro de casa, es otro tanto de demora hasta que tu ropa vuelve a estar lista para usar (por no hablar de los malos olores que en ocasiones adquiere cuando se tiende en un interior).

2. Más ecológico y mejor para tu bolsillo

La lavadora de casa tiene un consumo de agua y de electricidad –en lavados mayores a 30º– bastante alto. Consume al año 254 kWh, más de la mitad del gasto total necesario para iluminar una vivienda (410 kWh), y representa el 11,8 % de la factura eléctrica, según los datos ofrecidos por el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE).

A esto debemos agregarle el gasto en detergente y suavizante, así como también el altísimo consumo eléctrico de la secadora, si dispones de una (puesto que en España no se considera un electrodoméstico de primera necesidad como en otros países). Las máquinas de los servicios de lavandería son industriales y de alta gama, por lo que son más eficientes y pueden llegar a reducir más de un 20% el gasto de agua. Al final de cada mes, lo notarás cuando lleguen tus facturas. Una familia de cuatro miembros ahorraría en lavado y secado unos 20 euros semanales. En resumen, el uso de lavanderías autoservicio permite ahorrar 675 euros anuales en la factura de la luz, unos 1.000 euros al año (si contamos con el gasto de agua y productos de limpieza).

3. ¿Más higiénico?

Según relató a la revista Time Kelly Reynolds, investigadora de gérmenes y profesora asociada de salud ambiental de la Universidad de Arizona, “un solo gramo de materia fecal contiene millones de virus” y “a pesar de con qué asiduidad te limpies, la ropa interior de la mayoría de personas tiene como promedio una décima parte de un gramo de residuos fecales”, tal y como aseguró Chuck Gerba, también profesor de microbiología en la Universidad de Arizona.

Los expertos explicaron que muchas de esas bacterias o patógenos sobreviven al lavado –incluso a los programas de mayor temperatura– y algunas de éstas se quedan en el tambor. Correremos especial riesgo cuando mezclamos nuestra ropa junto con la de alguien que ha estado enfermo, por este motivo los investigadores recomiendan realizar ciclos de lavado sin ropa con lejía u otro tipo de desinfectante. En LavoPlus todos nuestros programas de lavado cuentan con ácido peracético, un potente desinfectante, respetuoso con tu ropa.

4. Puedes aprovechar el viaje

Algunos estarán pensando que lo que tardas en ir y venir, lo ganarías en tu casa haciendo otras cosas. Además de ser más eficientes y tardar menos tiempo con resultados profesionales, en LavoPlus, nuestros establecimientos cuentan con wifi para que nuestros clientes puedan realizar trabajos o consultas on-line a través de sus portátiles o tablets.

“Otros clientes durante el tiempo del lavado, hacen la compra en supermercados de alrededor o disfrutan de un momento de ocio en las cafeterías situadas junto a nuestros establecimientos”. Por no hablar de que, si decides ir caminando, también aprovecharías para hacer algo de ejercicio y así matas ‘dos pájaros de un tiro’.

 

Artículo parcial obtenido de La Vanguardia